A la edad de 2 años sufrió un accidente producto a una
caída. A la edad de 4 años comenzó a asistir a la escuela primaria ¨Héroes de
Playa Girón¨ del municipio (a vías no formales). El primer día de clase la
dirección de la escuela les comunicó a los padres que el niño debía atenderse
en el Centro de Diagnóstico y Orientación (CDO).
Los especialista del CDO, decidieron enviarle una
maestra a la casa para que le impartiera clases. Esta asistió en un período, de
tres veces por semana, en un breve tiempo. Luego se le dificultó las clases por
no tener maestra, (falta de personal en la escuela). Por segunda vez,
decidieron enviarle una maestra, pero esta vez, una hora a la semanal. El niño
se identificaba muy bien con ella, se mostraba de forma sociable a la hora del
estudio.
Debido a su encierro, la conducta positiva fue
disminuyendo y comenzó a tener rasgos de violencia e irritabilidad. Entonces,
la escuela decidió retirar a la maestra sin contar con los padres.
Alejandro empezó a desarrollar una obsesión excesiva
por los animales: alacranes, lagartijas, arañas, insectos, etc., tratar de
sociabilizarlo se les hacía difícil a los padres por la disyuntiva de no tener
control sobre él.
A la edad de los 12 años se lanzó por la ventana del
cuarto y se desplomó contra el techo de un vecino, recibiendo quemaduras por
fricción.
Posteriormente a los 14 años se lanzó por la ventana
de la cocina que da a una pendiente de no menos de 15 metros. El adolecente, decía a sus padres ¨quiero ser
como una mariposa para salir volando a la calle y convertirme nuevamente en
niño para jugar con los niños¨.
La psiquiatra que lo atendía desde el comienzo de su
enfermedad, propuso reducirlo a la obediencia (atarlo por un breve de tiempo
hasta que pasara las crisis), esto hizo efecto, pero por un muy poco tiempo.
Debido a su talla y corpulencia, era casi imposible llevarlo a cabo.
Alejandro ha agredido a sus padres, ha roto las
puertas en reiteradas veces, a lanzando objetos contra ellos y por las
ventanas, hasta incluso materia fecal etc.
Por esta razón su madre un día decidió ampliarle su
espacio sacándolo al portal, protegiéndolo por una reja de un metro de altura y
candado, al principio fue efectivo, luego la saltaba, donde tuvieron que subir
la reja a dos metros de altura. Su fuerza la viró de tal manera que se expuso a
una caída. Antes esta situación optaron abrir la reja y bajarlo a la calle.
Custodiado por ellos.
En la calle, no respondía a las órdenes de sus padres,
invadía los jardines de los vecinos para atrapar los insectos o, otro animal.
Penetraba en las fincas aledañas que tienen cría de ganado mayor, que las
custodian con armas de fuego. En la noche, les es imposible a los custodios
determinar el tipo de persona. Y tienen cuidado en llamarle la atención, porque
el niño arremete contra ellos lanzándole escupidas, e incluso hasta golpes, y
se va corriendo desenfrenadamente sin control, provocando otros hechos de
desórdenes públicos.
Ha roto los parabrisas de autos, guagua, y los
cristales de las puerta de los vecinos, con piedra, cruza las calles corriendo
sin mirar el tráfico, ha llegado hasta la CUJAE, atraviesa la 6 vías por donde
está la línea férrea pasando por debajo de los trenes.
Se monta en cualquier ómnibus y viaja hasta donde
entiende, deambulando por las calles hasta altas horas de media noche. En el
desespero de sus padres han tenido que efectuar un sin número de denuncias en
la policía por ausencia a domicilio.
Se niega a entrar a la casa diciendo que está
obstinado del encierro; para animarlo le compraron una computadora, además del
TV y DVD. No le presta atención.
A pesar de las múltiples de gestiones que han hecho
los padres. El problema no se resuelve desde los 12 años de edad, y su
situación actual, cada día es más peligrosa, por no contar con las condiciones
elementales de espacio en la vivienda para su actividad y entretenimiento.
Todo lo antes expuesto, tiene conocimiento: La
Dirección Provincial de Salud, Poder Popular municipal y Provincial;
Departamento Provincial de Asistencia Social, Dirección municipal de la
Vivienda, Policía Nacional Revolucionaria, Delegado de la zona, Consejo de
Estado, MININT, y Ministerio de Educación.
El 9 de junio
de 2014 los padres se presentaron en la Dirección Provincial de Salud, con el
objetivo de tratar de resolver la situación. Fueron atendidos por Susana jefa
de asistencia social, quien les explicó que el caso era de la Doctora Emely
Alfonso Jefa provincial de psiquiatría. Cuando se dirigieron a la doctora
Emely, ésta les aconsejó internar al muchacho en el servicio de psiquiatría del
Hospital Calixto García, con el fin de cambiarle su tratamiento para más
adelante ubicarlo en una institución por su difícil manejo.
Al muchacho se le cambió completamente el tratamiento
de pediatría por el de un adulto, y fue enviado a la casa.
En la mañana del 12 de junio de 2014 tuvo una crisis
agresiva no vista por sus padres hasta ese momento. Fue de tal la intensidad,
que incluyó lanzar botellas, piedras, y golpear las puertas, tuvieron que
intervenir la policía con cuatro carros patrulleros, para dominar la situación.
Incluyendo el traslado de su madre a un hospital por la presión arterial y el
trasladado del niño al Hospital Calixto García donde fue internado en la sala
de urgencia de psiquiatría.
Para calmarlo le suministraron una inyección
intramuscular con dos diazepan, dos haloperidol, dos fenobarbital, y dos
benadrilina, donde pudo lograr dormirse al cabo de las dos horas, aún esposado
por la policía. Su estadía fue de una semana. Las inyecciones eran tres veces
al día y las agresiones se intensificaban con mayor fuerza. A los 7 días le
dieron el alta alegando que lo que tenía no era un problema psiquiátrico, ¨solo
una respuesta al daño neurológico que presentaba, que no estaba en sus manos¨,
le pusieron un tratamiento fuerte, y para la casa. Esto fue el 20 de junio de
2014.
El 25 del mismo mes, ya bajo tratamiento médico los
padres se presentaron ante la doctora Emely para que le diera respuesta de su
ubicación en la institución. Para sorpresa de ellos, la doctora les comunicó
que él no clasificaba en ninguna institución, pero les dijo, ¨en su lugar les
aconsejaría que vayan a un neurólogo para ver si lo operan y le quitan algún
pedazo de cabeza, aunque pierda algunas funciones, eso lo pondría más
manejable¨. ¨y vean a Susana¨, está les informó ¨no tenemos ninguna
institución, todas están llenas¨.
Se preguntaron: ¿QUE FUE ESTO, QUE PASO AQUÍ? , ¨nos
vemos con un niño de 16 años de edad y 172 Libras de peso corporal, lejos de
mejorar, lo llevaron al hospital caminado y consiente, ahora lo tenemos sentado
en una butaca del cuarto, su cuerpo no responde, no camina, apenas es capaz de
tragar sus alimentos, no logra articular palabras, no logra comer por sí mismo,
se defeca y se orina¨, no abre los ojos, y no responde a estímulos ninguno¨.
¨Que han hecho con nuestro hijo¨
¨Cómo puede suceder tal cosa, la doctora se ha
aprovechado de la situación desesperada que tenemos, se ha burlado de nosotros,
prometiendo cosas, y confiando en ella y su posición, donde pusimos a nuestro
hijo en sus manos ¨. ¨Estos médicos que representan lo más alto de la salud
cubana, se aprovecharon de nuestro sentimientos, y desespero desde hace más de
quince años, para engañarnos, no sé cómo pueden dormir tranquilo después de
cometer actos de abuso y crueldad, y que luego quede impune ¨, ¡QUE SOCIEDAD¡
¨la que una vez amamos, adoramos, juramos a defender aun a costa de nuestras
propias vidas, nos ha fallado¨.
Tratamiento médico luego de darle el alta médica en el
hospital Calixto García: Haloperidol de 1,5 miligramos, 1tableta a las 8 de la mañana, una a las 2de la tarde y en la comida, Diazepen
de 5 miligramos 1tableta a las 8 de la mañana, a las 2 de la tarde y otra las
10 de la noche, Fenobarbital de 100 miligramos 1 tableta cada 12 horas,
Valprobato de Magnesio de 200 miligramos 2 tabletas cada 8 horas, Parkisonil de
5miligramos 1 tableta cada 12 horas, Olazapina 1 tableta a las 10 de la noche.
Con este tratamiento comenzó a perder el habla, comer
por sí solo, caminar, descontrol del esfínter, tragar, pasaba todo el día inconsciente,
y durmiendo. Al pasar los días se empeoró, se notaba inflamación en las
piernas, y brazo izquierdo, este ultimo de manera alarmante, se notaba puntos
enrojecidos en los pies y señales de escaras.
El 30 de julio de 2014, fue visitado por el médico de
la familia, la pediatra y la enfermera quienes aconsejaron trasladarlo al
hospital para revisar el tratamiento médico, pues sus condiciones de sedación
no daban buena impresión médica, ¨tememos por su vida¨, así lo expresaron.
Ese mismo día, en la tarde, el niño dejo de
alimentarse y presentar fiebres altas, y no respondía al llamado, el médico de
la familia coordinó una ambulancia SIUM, y lo llevaron al pediátrico ¨Juan
Manuel Márquez¨, donde le diagnosticaron, ¨intoxicación medicamentosa¨
Lo ingresaron en el cuerpo de guardia. Los
facultativos comenzaron un proceso de desintoxicación, chequeos de rayos X,
análisis de sangre y medidas antitérmicas. Al segundo día decidieron
trasladarlo a la sala de psiquiatría donde fue recibido por la doctora Nadieska
quien continúo con la desintoxicación y más adelante le indicó un nuevo
tratamiento médico.
Al pasar los días, su estado de salud no mejoraba. A
los 34 días, el 5 de agosto de 2014, recuperó sus funciones, aunque no del
todo. El día 8 del mismo mes, los médicos decidieron darle un pase el fin de
semana, el 18 le dieron alta médica con otro tratamiento: Risperdal 3 cc a las
6 de la tarde, Parkisonil de 5 miligramos media tableta a las 8 de la mañana, 2
de la tarde y una a las 8 de la noche, Levomepromacina de 25 miligramos 1 a las
8de la mañana a las 2 de la tarde y a las 8 de la noche.
EL 25 de agosto la familia volvió a la Dirección
Provincial de Salud para entrevistarse con la culpable de lo ocurrido a su
hijo, Emelis Ignacia Alfonzo Carrillo y exigirle reparar el daño causado,
cumpliendo con la promesa que había hecho meses atrás y que no había cumplido,
los padres estaban decididos a denunciarla sino cooperaba. La misma les entregó
una carta donde le pide a la licenciada Susana que ubicara al niño en una
institución.
EL 22 de septiembre de 2014, la jefa del departamento
de asistencia social Susana Galván Valdés, les entregó una boleta de matrícula
al centro psicopedagógico ¨Rubén Martínez Villena¨. En el centro a pesar de lo
dicho por su director el Licenciado Osvaldo Herrera, ¨el niño no clasifica para
este lugar, pues aquí los niños no hablaban, y no se comunican¨. El niño
permaneció cerca de 30 días, sin lograr adaptarse.
Los padres se presentaron nuevamente en la institución
y Susana lo trasladó para otra clínica ¨Héroes de Laredo¨, un centro de óptima
calidad.
El niño asistió por dos meses, se escapaba para la
calle y aparecía en la noche o en la mañana del otro día defecado y orinado.
Esta situación empeoró con el tiempo.
En la actualidad se pierde más de dos días, lo
encuentran por el Mariel, El Rincón, San José de las Lajas, El Cristo de la
bahía de Regla y otros lugares.
El 26 de marzo de 2015, después de haberse escapado de
la casa desde el día anterior, lo encontraron cerca de la CUJAE y dijo a sus
padres me ¨violaron¨. La familia llamó a la policía, lo remitieron al Instituto
de Medicina Legal. Los especialista dieron positivo al abuso sexual. Aun la
policía no ha podido capturar al violador, aunque facilitaron sus
características.
Debido a esta
situación los padres se entrevistaron con Emeli, (ya han perdido la cuenta, de
cuantas entrevistas han tenido con la licenciada), quien les comunicó que el
caso había sido remitido para el municipio y el municipio alegó que ellos no
habían recibido ninguna carta, que desconocían del asunto. Llamaron a la
especialista y los atendió dos funcionarias Rita y Dania, estás les prometieron
y dijeron ¨este es el caso más crítico que hay en el municipio de Marianao¨, ¨
nos reuniremos con el director provincial de la comisión de prevención y les
aseguramos que la visitaremos¨.
Hasta la fecha están esperando la visita prometida. El
niño continúa deambulando por las calles exponiéndose a otros peligros del que
ya ha pasado.
¨Solo porque no existe una institución gubernamental
que ingresen al niño de lunes a viernes y que sus padres lo puedan tener los
fines de semanas¨.
¨El 10 de septiembre de 1999 Alejandro se cayó y por
esos días también hubo otro caso de un niño llamado Cristian, que sufrió las
mismas lesiones, los padres de estos niños pensaban diferente a los de
Alejandro y acusaron al gobierno que Cristian no era atendido en el CIMEQ y
CIREN porque no tenían dólares para pagar estos hospitales, poniéndose de
acuerdo con sus familiares en los Estados Unidos y aprovecharon la visita del alcalde del
estado de Illinois para sacarlo del país, alegando que la atención y
tratamiento que estaba recibiendo el niño en Cuba no era la adecuada, que debía
viajar a los EEUU para que lo vieran otros especialista y decidieran su
tratamiento¨.
¨Por esos días llegaron al hospital donde estaban
ingresados los dos niños, representantes de diferentes iglesias para convencer
a los padres de Alejandro que le darían toda la ayuda posible y que
aprovecharan la visita del alcalde para viajar a los Estados Unidos¨.
Los padres de Alejandro se negaron, alegando ¨todo lo
que necesita el niño lo tenemos aquí¨.
Fidel conoció de los dos casos y se entrevistó con el
médico Amado y el alcalde, y dijo ¨si los padres de quieren viajar para que lo
vean otros especialistas pueden ir¨. ¨Cuba no se opone¨.
¨Los padres de Alejandro no aceptaron la propuesta
para no traicionar a su comandante¨.