Dania
Virgen García
Los casos sociales críticos en Cuba, son abandonados
en su mayoría por los factores de la comunidad,
las instituciones municipales, provinciales, y el gobierno, llegándose a crear dificultades serias a
estas familias.
En muchas ocasiones
familias como la de Tania
Brigantti Pérez, de 40 años de edad, con dos hijos, uno de 18 años y una niña
de 8, llamada Yaquelin Ramos Brigantti.
La niña desde
que nació, fue abandonada totalmente por su padre biológico, quien es un
oficial de la Contrainteligencia que se llama Ramón Ramos.
Madre e hija residen en Calle 86 número 1518 entre 15
y 17, en la cuartería El Hueco, en
Playa.
Tania Brigantti fue detenida la mañana del día 5 de
marzo junto a su hija cuando se dirigía a llevarla a la escuela “Mario Muñoz”,
y acusada por actos contrarios al menor, con un número de denuncia 63921del año
2011.
Ernesto Frank Álvarez es la fuente de información de
este triste caso.
Esta familia, integrada por cinco personas, vive en un estado incalificable de precariedad y miseria.
Duermen en el piso, no tienen sustento económico, llevan más de 20 años sin ser
atendidos por los factores y funcionarios del gobierno. A pesar de que el padre
de Tania es también un alto oficial, Rafael Brigantti.
Cuando Tania, debido a su situación económica, se
dirigió al padre de la niña para reclamarle la manutención, este un día la
amenazó que si volvía a molestarlo la iba a matar.
El día que detuvieron a Tania la ingresaron en el
Hospital Siquiátrico de la Habana, (Mazorra) en la sala Castellano, para un
proceso investigativo. La niña fue internada en la escuela primaria Cambodia,
situada en Calle 4ta entre 1ra y 3ra, Miramar, en la que estará de lunes a
jueves, y de viernes a domingo es ubicada en un hogar para niños sin amparo
familiar, situado en 64 entre 7ma y 5ta A, Playa.
Madre e hija están en espera de un juicio para decidir
el destino de las dos.
Todo comenzó una mañana del año 2011. La niña Yaquelin Ramos se encontraba en la
escuela primaria “Comandante Pinares”, sita en 13 y 78 y su madre fue a
llevarle la merienda a la escuela. Como
la niña es pobre, la maestra la maltrataba, y le negó a Tania que le entregara
a su hijita la merienda, por lo que se produjo un altercado con la maestra, en
el que intervino la directora. Esta última llamó a la policía, pero no pudieron
atrapar a Tania, que ya se había marchado.
A las 4 de de la madrugada del siguiente día, tres
carros patrulleros se personaron en el domicilio de Brigantti, con una orden de
detención. Allí se produjo un forcejeo, en el que intervinieron la madre de Tania, y su hermano Rafael que
tenía la niña. Los agentes de la policía le rastrillaron la pistola y los
amenazaron con matarlos si no soltaban a la niña. La familia, por miedo, no
denunció a los policías, pero tuvieron conocimiento los factores de la FMC, el
Poder Popular, el CDR, y las instituciones médicas, que nunca le prestaron atención al caso.
Tampoco atendieron a tiempo los problemas sicológicos
causados a Tania Birgantti que comenzaron a agravarse con el tiempo, al punto
que ya deambulaba por las calles junto a su hija, por miedo a que se la
quitaran.
Desde el día de los hechos referidos, la acción
policiaca continuó contra Tania Brigantti Pérez, hasta que fue detenida
violentamente por una decena de agentes policiales, la mañana del pasado 5 de marzo.
dania@cubadentro.com