Dania
Virgen García
En la tarde del 5 de octubre me encontraba en la unidad de la policía de Dragones, en la Habana Vieja, con varios opositores, apoyando a la hija y al esposo de la opositora Madeline Lázara Caraballo, quien se encuentra acusada de un supuesto delito de escándalo público, cuando recibí por vía telefónica la noticia de que la Dama de Blanco Niurka Luque ya estaba en libertad.

No voy a negar que me puse nerviosa. Cuando nos fuimos
de la unidad todos los opositores, me dirigí para el domicilio de Niurka, en el
municipio Cotorro.
Inmediatamente envié
mensajes a varios opositores y un Twitter, para festejar una victoria
más de nuestra lucha constante.
La Dama de Blanco Niurka Luque Álvarez fue enviada a
prisión hace seis meses y medio injustamente, solo por haber apoyado en la
mañana del pasado 10 de marzo a los pobladores de 15 viviendas del municipio
Cotorro que iban a ser desalojados por
órdenes del general de división Bruzón, y el presidente del Poder
Popular. En varias ocasiones, el oficial de la Seguridad del Estado llamado
Daniel le manifestó que sería encarcelada porque según dijo, estaba cansado de
ella.

De esta manera el gobierno trata de silenciar a
mujeres valientes que a diario reclaman justicia por las personas inocentes,
por los pobres, y por todos aquellos que exigen a diario un cambio. A esto
llaman la dictadura “hacer
contrarrevolución”. Lo que nunca podrán es silenciar los ideales de estas
mujeres. Que recuerden que la prisión para nosotras no es un castigo, sino una
experiencia para seguir luchando.
dania@cubadentro.com