Dania
Virgen García
Queridos hermanos: Espero que cuando lean nuestra
carta se encuentre René disfrutando de la libertad condicional que le impuso el
país de los malos.
Tienen que recuperarse comiendo mucho, así que cuando
se coman los bistés de carnes de res y las buenas comidas que saborean a
diario, acuérdense de que los niños en Cuba no la vemos pasar, ni tampoco los
enfermos, ni los viejitos
revolucionarios que tanto los apoyan a ustedes
Nosotros aquí tenemos esperanzas de que vuelvan
pronto, pero no sabemos si se van a adaptar a estar aquí.
No se olviden de las hambrientas brigadas de respuesta
rápida, y de la Seguridad del Estado, que pertenecen al sindicato “Cuba sí, yanquis no” que tanto los apoyaban
en marchas y tribunas, e impiden que la oposición en cuba salga a las calles a
exigir al gobierno la libertad de los presos políticos. Quiero decir, los de
aquí.
Si tienen falta de dinero en el teléfono celular, los
niños en Cuba estamos recaudando un dinero para enviárselo y que le sirvan al
menos para que sigan hablando por teléfono desde allá, con el presidente de la
Asamblea Nacional, Ricardo Alarcón, sus familias, los hermanos Castros, y los
periodistas de la Mesa Redonda.
Nosotros acá también estamos luchando por todos los
presos políticos y de conciencia en toda Cuba. Tenemos entendido que no solo
son cinco, como ustedes, sino que existen más de 65 de este lado, en las
cárceles cubanas. Que son torturados, poseen mala atención médica y están
esqueléticos por la falta de alimentación. La que le suministran es elaborada
con todo tipo de porquerías y suciedad. La carne de res no la ven pasar, ni
cuando son liberados, menos todavía. Las prisiones están llena de ratones que
conviven con los presos, como el pajarito que cría Ramón en su celda.
Los presos políticos viven junto con delincuente altamente connotados, les son
violados todos sus derechos, cumplen sanciones sin ser juzgados, solo por ser
contrarrevolucionarios.
René, Antonio, Gerardo, Ramón y Fernando, ustedes son
cinco espías, y nuestros presos políticos y de conciencia no son terroristas,
solo luchan por la democracia, ellos son tan héroes como ustedes.
Sin más nos despedimos solicitándoles que le supliquen
a los Castro que muchos de los niños cubanos quieren tener esa libertad
condicional que se le dio a René.
dania@cubadentro.com