Dania
Virgen García
Fidelina Pérez Morales fue sancionada a prisión
domiciliar por introducirse en un consultorio médico porque no tenía donde
vivir, con su hija enferma, que padece de síndrome de Down, problemas
pulmonares y renales.
Fidelina Pérez, quien reside en la calle San Carlos,
número 15 entre Santa María y Padre de las Casas, en Palmira, provincia de
Cienfuegos llevaba más de cinco meses viviendo en dicho consultorio médico.
La Dirección de Vivienda no quiso ayudarla entregándole
un domicilio para que viva con su hija enferma. En lugar de eso, la llevaron a
juicio.
Refiere Pérez Morales que Bienestar Social le negó la
chequera para costear los medicamentos de su hija, por lo que tiene que ir a
diario al basurero en busca de chatarras para venderlas y así poder mantener a
la niña.
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